Me molesto conmigo mismo cada vez que me siento en el sofá y tomo el control del tv como si fuese Homero Simpsons. Me enoja ver que mi cuerpo quiere quedarse durmiendo todo el día disfrutando de Netflix y comiendo carbohidratos refinados. Me enfada ver cómo pago una membresía de gimnasio pero no voy lo suficiente por que siempre aparece una excusa estúpida para faltar al ejercicio. Entiendo que es una lucha constante a la cual no debemos rendirnos. No quisieras verte de aquí a diez años con la misma condición física o ganando el mismo salario o con las mismas malas actitudes. Ya basta de decir que comienzas el lunes o qué comienzas mañana. Mañana podrías estar enfermo o hasta muerto. Recuerda que como eres hoy es que te van a recordar cuando no estes. Hoy y ahora es tu momento.
He visto miles y miles de personas que son talentosas en algo pero por falta de disciplina no logran sus metas y objetivos. Desde atletas hasta escritores y actores que han dejado su vida en un trabajo de ocho horas y las próximas 16 horas son solo para comer, descansar y ver televisión cómodamente. A mí me gusta ver películas y series pero cuando eso se vuelve la norma y la conducta hay un problema. Eso es lo que quiere el gobierno y sus líderes, quiere a personas que no hagan absolutamente nada, que nos les importe su alrededor y disfruten de una comodidad que tape la verdad en la que estamos metidos. De mil personas posiblemente uno sea el que tome verdaderamente este desahogo de manera seria y aplique cambios a su rutina. Ese uno puede ser el próximo gobernador o el próximo presidente, ese puede ayudar a muchos a lograr lo que él pudo hacer haciendo las cosas ahora y comenzando hoy. Desahogate y no lo dejes para mañana.
0 comentarios:
Publicar un comentario